Hola queridos lectores,
Me introduzco en este momento en el final del blog. Hemos redactado
en entradas previas las producciones del valle del río del Najerilla o de la
zona Bética , entre otras y resulta irónico llegar a este punto abordando el
final del Imperio En esta última entrada vamos a enfocarnos en la zona de la
Meseta y más especialmente en las últimas producciones elaboradas antes de la caída del Imperio Romano. Concretamente nos
centraremos en Asturica Augusta y zonas del sur de la meseta como Cubas de la
Sagra o Loranca.
En el caso de la actual Astorga esta fue un importante punto
de conexión con el sur peninsular, fundamentalmente con Emerita Augusta, y
también con las rutas del norte. Vamos a centrarnos en las producciones de
cerámica gris tardía de este enclave. Ya hablamos sobre la cerámica tardía gris
en la entrada centrada en Bracara Augusta. Este tipo de producción es diferente
a las cerámicas provenientes de los alfareros riojanos o de los alfares meseteños
de sigillata. Respecto a sus características principales la pasta es dura, bien
decantada y fina o medio fina. El tipo de cocción es reductor, de ahí que la
pieza tenga ese tono grisáceo.
Estas producciones son de tipo local o regional. La mayoría
de estas piezas se han encontrado en las provincias de León, Palencia y Zamora;
además de ciudades de Portugal como Bracara Augusta. A partir de estos datos
inferimos que desde inicios del siglo V hasta principios del siglo VI se
produce en Hispania un tipo de cerámica fina de mesa que imita a las producciones
gálicas. Los focos de producción se encontrarían en el sur de la meseta, aunque
hay que destacar que los alfares riojanos del valle del río del Najerilla (para
más información sobre este conjunto de alfares, tenemos una entrada dedicado a
ello) también llegaron a manufacturar cerámica gris tardía, aunque en muy bajas
proporciones. Aún no está muy claro cómo empezó en Hispania esta nueva “moda”, teniendo
en cuenta que estamos rozando la caída del Imperio. Una de las teorías que
cobra más fuerza es que estas nuevas producciones llegaran de la mano de galo-romanos
que vinieron con los suevos y vándalos que se asientan en Gallaecia (Astorga, Lugo y Braga).
Nos adentramos ahora en la meseta sur, en un pequeño pueblo
llamado Cubas de la Sagra, en la Comunidad de Madrid. En unas excavaciones
acontecidas en el año 2010 se encontró una ocultación. Esta se situaba en una
fosa excavada en el sustrato geológico y en uno de sus extremos
se descubrió un depósito construido con lajas de piedra e ímbrices en cuyo
interior fue hallado u gran conjunto de recipientes cerámicos. Contiguos a
estos también se encontró una caja-depósito de objetos de bronce en perfecto
estado.
La fecha de estas piezas se ha definido a partir de la
decoración de estas. Su cronología rondaría en torno a finales del siglo IV y
principios del siglo V. Los platos son más antiguos que los cuencos, hecho que
confirma que se transmitían de generación en generación. Hay muy pocas ocultaciones
datadas en época bajoimperial aunque llama la atención que cinco de estas hayan
aparecido en el sur de la meseta. Este tipo de hallazgos reflejan las
circunstancias de un momento trágico en una época convulsa que empujó a estas
familias a dejar sus posesiones más preciadas para no volver a verlas nunca más.
Estas ocultaciones nos permiten visualizar cómo se vivía a finales del Imperio
Romano en la meseta.
En cuanto al yacimiento en sí, Cubas de la Sagra consta de
un gran centro alfarero con estructuras de producción y almacenamiento de
materiales cerámicos y latericios, además de un posible secadero de cerámica. Se
trata del mayor complejo artesanal de época romana encontrado en el sur de Madrid,
donde ya se conocían otros focos importantes como Loranca en Fuenlabrada y Ermita
de Santiago en Valdemoro. Los conjuntos encontrados en la ocultación refleja que
había una gran actividad alfarera y que había un comercio a pequeña escala de
las piezas. Probablemente el complejo de Carranque sería el órgano que
controlaría la distribución de este conjunto de alfares que seguramente tuvieron
una gran importancia en la meseta.
En conclusión, a lo largo de esta entrada hemos visto una dicotomía
a finales del Imperio romano que podemos extrapolarlo a la sociedad. Mientras que
en algunas zonas como Astorga surgen nuevos estilos cerámicas; en otras como
Cubas de la Sagra los habitantes de este territorio tuvieron que esconder sus pertenecías
más apreciadas y huir debido al periodo convulso que estaban viviendo.
Un Saludo y Feliz Navidad!!
Almudena Sanguino Tallón
JUAN TOVAR, L.C, SANGUINO VÁZQUEZ, J, OÑATE BAZTÁN, P.
(2013): “Un conjunto tardorromano excepcional en Cubas de la Sagra (Madrid)”,
en Bernal, D. Juan, L.C. Bustamante, M. Díaz J.J, Saez, A.M. ; Monografías Ex
Ofificina Hispana 1, Tomo II, 2013, PP. 159-175.
PAZ PERALTA, J.A. (2013): “La vajilla de cerámica hispánica
tardía gris y naranja en Astúrica Augusta (Astorgaa, León). Conjunto C.”, en Ex
Officina Hispana – Cuadernos de la Seach, 1, PP. 217-256.